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Anoche, la puebla estadunidense vio el primer debate entre los dos candidatos presidenciales, Hilary Clinton y Donald Trump. Fue una oportunidad para Trump a presentarse como un candidato serio y tranquilo, pero se pude ver que él faltó la preparación y reaccionó nervioso a las provocaciones de Clinton.
Fue un espectáculo con el sabor de reality TV. Había millones de personas mirando el debate en la Universidad de Hofstra en Long Island en números casi igual al Superbowl. Los votantes también documentaron al debate en las redes sociales. Twitter y Facebook explotaron con comentarios y reacciones a los dos candidatos presidenciales. Ver todo el debate entero aquí:
Durante el debate, las preguntas se movieron del economía al miliatario y la guerra en Irak. Clinton respondió con el porte mientras Trump la interrumpió repetidamente. Tampoco supo reaccioinar para defender sus puntos débiles, como su negativa a publicar sus impuestos, la mentira de que el presidente no ha nacido en los Estados Unidos o su apoyo a la invasión de Irak. Fue aparente que Clinton fue más preparada para el debate y para responder a las preguntas de los puntos más débiles de su campaña. Sin embargo, los dos tienen reputaciones basadas en mentiras y anoche fue la primera oportunidad de ver cómo responden a la presión en frente todo el país.
