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El miércoles por la mañana se produjo un grave accidente en el estado mexicano de Oaxaca. Un autobús de pasajeros de la línea Yosondúa, que había salido de la Ciudad de México, se volcó y cayó por un barranco en el municipio de Magdalena Peñasco. Según el reporte provisional del Secretario de Gobierno de Oaxaca, José de Jesús Romero, al menos 27 personas perdieron la vida y otras 21 resultaron heridas.
De las personas fallecidas, se informó que 13 eran hombres, 13 eran mujeres y un niño de un año y medio también perdió la vida en el accidente. El autobús se salió de la carretera cerca de la clínica rural 184 y cayó por un barranco de más de 30 pies (10 metros) de profundidad.
Las autoridades de Oaxaca, incluida la policía vial, acudieron al lugar del incidente y comenzaron las labores de rescate utilizando retroexcavadoras para liberar los cuerpos que quedaron atrapados debajo del autobús. Además, se trasladó a las personas heridas al hospital rural del IMSS Tlaxiaco para recibir atención médica.
Según los primeros informes de las autoridades de Seguridad Pública y Vialidad Municipal de Tlaxiaco, parece que el autobús se quedó sin frenos y perdió el control en una curva, lo que provocó el trágico accidente.
La comunidad local se unió a los esfuerzos de rescate, brindando ayuda para atender a los heridos y recuperar los cuerpos de las víctimas. El gobernador de Oaxaca, Salomón Jara, expresó sus condolencias a las familias afectadas y aseguró que el gobierno está brindando apoyo en las acciones de rescate y en la atención a los heridos.
Los servicios de emergencia desplegaron personal y recursos adicionales, como sábanas y cobertores para los cuerpos, así como grúas para retirar el autobús accidentado. Es un trágico suceso que ha causado una gran pérdida de vidas y heridas a numerosas personas, y se espera que las autoridades continúen investigando las causas exactas del accidente.
