Y la llegada a un país que parece alegrarse de recibirlo: casi la mitad de los estadounidenses y el 78% de los católicos dijeron que estaban ansioso por la visita del papa a Estados Unidos.
En una escena que combinará política, religión, y economía, el papa Francisco y el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, tiene previsto reunirse en la grandeza del Despacho oval para avanzar en causas afines a ambos.
El papa tiene previsto ofrecer este miércoles por la mañana sus primeras palabras a Estados Unidos en el jardín de la casa Blanca y hablara más tarde con los obispos del país. Ese discurso es muy esperado, dada la cierta desconexión entre énfasis de Francisco en la justicia social y una Iglesia misericordiosa y la guerra cultural librada por los obispos estadounidenses en los últimos años por cuestiones como el aborto y los derechos de los homosexuales.