Según WTVD, el señor estaba desesperado y hambriento y no tenía manera de llegar a la tienda. Así que llamo al 911.
“Yo no puedo hacer nada no puedo ir a ninguna parte, no puedo salir de mi maldita silla.” Eso fue lo que el hombre de 81 años le dijo a la operadora del 911
Lo único que él quería era una cabeza de repollo, unas latas de frijoles y un poco de palomitas con un jugo de tomate y refrescos.
La operadora Hinson fue a la tienda y compro lo que el hombre quería. Los entrego con la ayuda de los agentes de policía de Fayetteville.